Cuando pensamos en las cosas agradables y saludables de la vida, inmediatamente se nos viene a la mente la posibilidad de realizar alguna actividad al aire libre, desde una simple caminata sin nadie que nos interrumpa hasta algún encuentro deportivo entre varios amigos con toda la adrenalina que ello puede involucrar.
El caso de Viña del Mar como ciudad es especial, salta a la vista. Primero porque el mar y su inmensidad invita día a día a la gente a disfrutar de alguna actividad, si a eso se le suma buen clima, practicamente lo que queda es que la persona se anime y salga de la casa a disfrutar del entorno. Pero la mayoría de la población no lo hace…¿por qué? Bueno, creemos que uno de los factores es la falta de infraestructura apropiada en la ciudad para satisfacer a la gente en sus diferentes preferencias, por ejemplo, una eficaz red de ciclovías o espacios adecuados para un buen trote o patinaje, sólo por nombrar algunas.
Profesor Felipe Ortega Aliaga
Escuelas de Fútbol 